Con esta colaboración, Wildfire operará una planta piloto en Brisbane (Australia) para la producción de hidrógeno para su uso en cualquier aplicación, incluida la movilidad. Por su parte, Naturgy aprovechará su experiencia en proyectos de gases renovables para validar el proceso y asegurar su escalabilidad a nivel industrial, con el objetivo de estudiar su implementación en España y en Europa.
Para el director de Innovación de Naturgy, Chapado, «la compañía es consciente del reto global al que nos enfrentamos en la descarbonización y la lucha contra el cambio climático. En este contexto, percibimos la innovación como la herramienta que nos permite alcanzar soluciones energéticas limpias para el futuro. Esta colaboración es una muestra del compromiso de Naturgy con los gases renovables, en cuyo desarrollo la compañía quiere jugar un papel clave”.
El director general y director ejecutivo de Wildfire, Perkins, ha señalado que “Wildfire se complace en anunciar este acuerdo de servicios con Naturgy, una empresa líder en el sector del biometano y el hidrógeno en toda Europa. Estamos deseando trabajar con el equipo de innovación de Naturgy y demostrar nuestra tecnología de conversión de residuos en hidrógeno a través de operaciones piloto adicionales y completar un estudio conceptual para un primer proyecto en España”
Las inversiones en generación renovable confirman el compromiso estratégico de Naturgy para alcanzar una solución equilibrada al trilema energético: contribuir a la descarbonización de la economía, asegurar la seguridad de suministro y mantener un precio asequible de la energía para todos los consumidores.
Naturgy se ha fijado como objetivo jugar un papel clave en el desarrollo de los gases renovables, tanto en la producción y distribución de biometano en España en el corto plazo, como en el desarrollo del hidrógeno como vector energético que tendrá un impacto significativo en el mix energético a medio plazo.
La compañía se ha consolidado como uno de los principales promotores del gas renovable en España, con más de 60 proyectos en distintas fases de desarrollo. Cuenta con dos plantas de producción propias de biometano ya en operación: una situada en la EDAR de Bens (A Coruña) y otra ubicada en Cerdanyola del Vallès (Barcelona), que fue la primera en España en inyectar a la red gas renovable procedente de vertedero. En los próximos meses está previsto que entre en operación una tercera en Vila-Sana (Lleida) y ya ha iniciado la tramitación de otras dos que se construirán en Torrefarrera (Lleida) y Utiel (Valencia).
La compañía está bien posicionada para aprovechar la oportunidad que ofrecen los gases renovables para avanzar hacia la descarbonización y está dispuesta a desplegar importantes inversiones y recursos en este negocio, teniendo en cuenta el potencial que ofrece España para su desarrollo, con 160 TWh/año, equivalente al 40% de la demanda de gas del país.