Las empresas petroleras que quieren permanecer en Venezuela han estado solicitando permisos del Tesoro estadounidense después de que Washington volviera a imponer sanciones al país el mes pasado. Repsol firmó recientemente un acuerdo con la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) que amplía la cantidad de campos petroleros a explotar en una empresa conjunta. Se espera que en los próximos meses los activos produzcan 20.000 barriles diarios.
Estados Unidos están intentando utilizar las sanciones como instrumento para garantizar elecciones presidenciales más justas en julio. El año pasado, Washington eliminó temporalmente las restricciones a los sectores del oro y el petróleo de Venezuela después de que el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y la oposición firmaron un acuerdo en Barbados sobre garantías electorales.