El Parlamento iraní, conocido como la Asamblea Consultiva Islámica, ha propuesto este sábado bloquear el estrecho de Ormuz como respuesta al reciente bombardeo de Estados Unidos contra infraestructuras nucleares en territorio iraní. Este estrecho es una de las rutas comerciales más estratégicas a nivel global. No obstante, la decisión definitiva corresponde al líder supremo del país, el ayatolá Alí Jamenei.
De acuerdo con declaraciones transmitidas por la emisora estatal iraní, el general Esmaeil Kousari, miembro de la Comisión de Seguridad Nacional del Parlamento, aseguró que la institución «ha llegado a la conclusión de que debe cerrarse el estrecho», aunque matizó que será el Consejo Supremo de Seguridad Nacional quien tendrá la última palabra.
Irán es un actor clave en el mercado energético mundial, con una producción diaria de 3,3 millones de barriles de petróleo y exportaciones que rondan los 1,7 millones. En caso de un aumento en las tensiones, existe un riesgo real de que se vea afectado el suministro global de crudo procedente del país.