Ello “podría rebajar el Euríbor un tanto más desde sus niveles actuales”, si bien “el margen bajista del índice es cada vez menor”., señala en relación con los factores que influirán en la futura evolución del Euríbor.
“Creemos que habrá que esperar hasta septiembre para que se produzca la última bajada de tipos -reunión en la que el banco actualizará de nuevo sus pronósticos de inflación y de crecimiento- u octubre. Antes de ello, Lagarde y el resto de políticos monetarios europeos tienen marcada en sus agendas una fecha clave: el 9 de julio. Es el límite temporal impuesto por Trump a sus socios comerciales para alcanzar un acuerdo sobre aranceles”. Esta semana el Euríbor a 12 meses ha subido ligeramente al nivel del 2,09%.
Esta semana el Euríbor a 12 meses ha subido ligeramente al nivel del 2,09%. Este repunte se ha producido después de la reunión del BCE del pasado jueves, en la que los dirigentes de la política monetaria de la eurozona rebajaron los tipos 25 puntos básicos, lo cual no fue una gran sorpresa. Lo que sí que sorprendió al mercado fue el comunicado de Lagarde.
La presidenta señaló que el BCE estaba “alcanzando el final del ciclo de la política monetaria” y que “estaban en un buen lugar”. Ambas apreciaciones podrían sugerir que el nivel de resistencia del banco a reducir los tipos por debajo del 2% es mayor de lo que se estimaba inicialmente. No obstante, la reticencia de la presidenta a dar por cerrado el ciclo deja la puerta abierta a lo que será, en nuestra opinión, el último recorte de tipos en este ciclo. A no ser que las negociaciones comerciales con EE.UU. den un giro inesperado a peor, el banco debería mantenerse de brazos cruzados en la próxima reunión de julio. Creemos que habrá que esperar hasta septiembre para que se produzca la última bajada de tipos, reunión en la que el banco actualizará de nuevo sus pronósticos de inflación y de crecimiento, u octubre. Antes de ello, Lagarde y el resto de políticos monetarios europeos, tienen marcada en sus apretadas agendas una fecha clave: el 9 de julio.
Esta es la fecha límite que Trump ha impuesto a sus socios comerciales para alcanzar un acuerdo y poder rebajar la tasa de los aranceles «recíprocos» impuestos en el «día de la liberación». En el caso de la UE, de no alcanzarse un acuerdo, la tasa arancelaria ascendería al 50%, frente al 10% vigente. La realidad es que no hemos recibido muchas noticias sobre las negociaciones entre la UE y EE.UU. hasta ahora, pero quizás la administración de Trump empiece a poner el foco sobre ellas ahora que ha cerrado un acuerdo con el gigante asiático. De mantenerse una tasa arancelaria tan elevada, el impacto económico sobre ambas regiones económicas sería más que considerable. Según algunas estimaciones recientes, unos aranceles del 50% provocarían pérdidas en el crecimiento del PIB de la eurozona de entre 0.5% y 0.6%, acercándola al estancamiento económico o, incluso, a territorio recesivo. En el caso de EE.UU., el impacto sobre el crecimiento económico sería menos pronunciado pero el efecto inflacionario no sería desdeñable. Por ello, resulta previsible que ambas regiones alcancen un acuerdo que rebaje las restricciones comerciales, como ya ha ocurrido con China.
¿Qué implicaciones tiene esto para el Euríbor a 12 meses? Cómo venimos diciendo, el margen bajista del índice es cada vez menor, aunque seguimos previendo un recorte de tipos adicional por el BCE que podría rebajar el Euríbor un tanto más desde sus niveles actuales.