Desde la Fundación, se detectó un repunte durante la primera parte del año de la tasa de ahorro fundamentalmente porque los hogares han considerado necesario devolver préstamos de manera anticipada para, de alguna manera, amortiguar el impacto de la subida del euríbor sobre sus costes financieros. No obstante, el director de Coyuntura y Estadística de Funcas, Raymond Torres, considera que esta tendencia «no va a continuar».
Las proyecciones de Funcas indican que la tasa de ahorro de los hogares, medida según la renta disponible, vuelva exactamente a la media histórica del 6,7% el año que viene, frente al 8,2% previsto para este 2023 o el 7,6% registrado en el 2022.
Así, se situaría exactamente en la misma tasa media registrada entre 2014 y 2019 (6,7%), que está por debajo de la anotada durante los años de la crisis financiera -entre 2008 y 2013- cuando alcanzó el 8,8%. Desde Funcas, han detectado una aceleración en el crecimiento de la renta disponible de los hogares en términos nominales, que creció un 12,2% interanual en el segundo trimestre -tras el 11% en el primero-, siendo las tasas más elevadas de la serie histórica.
Estas cifras son debidas, según Funcas, al crecimiento de las remuneraciones y de las prestaciones sociales -fundamentalmente pensiones- que más que compensan el aumento en el pago de intereses.
Todo esto lleva a que la tasa de ahorro continúe actualmente en registros muy elevados, situándose en el segundo trimestre en la cifra más alta de un segundo trimestre de toda la serie -excluyendo 2009 y los años de la pandemia, 2020 y 2021, caracterizados por el fenómeno del ‘sobreahorro’-. El incremento del ahorro ha servido para devolver préstamos, han asegurado desde Funcas. Al mismo tiempo, la deuda del sector privado continúa reduciéndose, como viene haciéndolo de manera ininterrumpida tras la finalización de los efectos de la pandemia en el primer trimestre de 2021.
De hecho, en el segundo trimestre, la deuda consolidada para las sociedades no financieras se sitúa en el 66,6% y la de los hogares e instituciones privadas sin fines de lucro al servicio de los hogares (ISFLSH) en el 49,9%, siendo las cifras son las más bajas de los últimos veinte años.
En cuanto al consumo de los hogares, desde la Fundación prevén que se recuperará a finales de este año, en el último trimestre de este 2023, y se situaría en el nivel prepandemia.
Pese a esto, desde Funcas han advertido de que en 2024 habrá un menor impulso de la normalización del turismo y los acuerdos de recuperación de poder adquisitivo de los salarios, con su corolario en términos de renta disponible de los hogares y consumo privado. Así, se prevé que el deflactor del consumo privado registrará una ligera desaceleración, desde el 3,9% este año hasta el 3,6% en 2024.