El Tesoro dio mandato a mandato a Deutsche Bank, J.P. Morgan, Morgan Stanley, Nomura, Santander y Société Générale para colocar esta segunda emisión sindicada de 2023, en la que se ha registrado una demanda por encima de 30.000 millones de euros. «Se trata de una elevada demanda, en línea con la recibida por otros países europeos a plazos largos, que pone de manifiesto una vez más la confianza de los inversores en la economía española», destacan desde el Departamento que dirige Nadia Calviño.
En la primera emisión sindicada de este año –un bono a 10 años con vencimiento en abril de 2033–, el Tesoro emitió un importe de 13.000 millones de euros, con una demanda de 86.133 millones de euros, la segunda mayor en la historia de la institución, obteniendo por tanto una sobresuscripción de 6,6 veces lo emitido.
Durante el año 2022, el Tesoro recurrió a un total de cuatro emisiones sindicadas. En concreto, en enero lanzó la primera del año (a diez años) en la que captó 10.000 millones de euros. En la realizada en febrero (a 30 años) captó 7.000 millones de euros; en junio (a diez años) emitió 8.000 millones y en septiembre colocó 5.000 millones en un bono sindicado a 20 años, con una demanda de más de 40.000 millones. En la presentación este mes de la Estrategia de Financiación del Tesoro de 2023, el secretario general del Tesoro, Cuerpo, ya avanzó que el organismo recurrirá nuevamente a las sindicaciones bancarias para la emisión de determinadas referencias de Obligaciones del Estado.
Por lo que respecta a las emisiones regulares de valores del Tesoro, está prevista la realización de 48 subastas ordinarias de Letras y Bonos y Obligaciones del Estado.