Así, el PSOE transformará el gravamen extraordinario a la banca en un impuesto sobre los intereses y comisiones de las entidades financieras que estará vigente en los tres próximos años, hasta 2028, y a través de una enmienda al proyecto de ley para crear un impuesto mínimo global del 15% a grandes multinacionales, el Grupo Socialista transforma lo que era una prestación patrimonial de carácter no tributario en un impuesto, lo que a su vez permitirá que las haciendas forales de Euskadi y Navarra gestionen el tributo.
Pero aunque todos los focos estaban puestos en las tasas a la banca y las energéticas, el Gobierno ‘coló’ por la puerta de atrás, por medio de otras enmiendas en negociación con su socio Sumar y con acuerdos ya «avanzados», otras subidas fiscales que afectan al diésel, a los vapeadores y al tabaco o a los grandes ahorradores.
Ahora el Gobierno subirá los impuestos que paga el gasóleo de automoción en 9,37 céntimos por litro (el tipo general pasará de 0,307 euros por litro a 0,40069 euros) para equipararlo al de la gasolina, una medida que no aplicará a los profesionales.
Esta medida, que se ha incluido en una enmienda del PSOE a la ley que regula el tipo mínimo de las multinacionales, pretende incorporar los costes ambientales derivados del transporte por carretera y contribuir a moderar los gases de efecto invernadero. A pesar de ello, la propuesta prevé que en determinadas circunstancias el tipo general del impuesto baje a 0,35 euros por litro, en concreto cuando el precio del gasóleo supere durante dos meses consecutivos los dos euros el litro y el precio medio del barril de Brent en el segundo de esos meses sea más alto que el primero.
De salir adelante esta enmienda, el gasóleo de automoción pagará en concepto de impuesto de hidrocarburos un total de 0,47269 euros por litro (0,40069 euros de tipo general y 0,072 euros de tipo especial), igual que la gasolina, en lugar de los 0,379 euros por litro actuales (0,307 euros de tipo general y 0,072 euros de tipo especial).
También habrá subidas de impuestos al vapeo y al tabaco. Por lo que respecta a los vapeadores, la enmienda establece que el líquido para cigarrillos electrónicos que contenga menos de 15 miligramos de nicotina por mililitro de producto pagará 0,15 euros por mililitro y 0,20 euros si la cantidad de nicotina es mayor. Las bolsas de nicotina y otros productos de nicotina pagarán 0,10 euros por gramo. El PSOE explica que se ha decidido crear este impuesto como consecuencia del incremento de la comercialización de los cigarrillos electrónicos y la importante proporción de adolescentes y adultos jóvenes que los usan, a la espera de la directiva europea que armonice la fiscalidad de estos productos.
Asimismo se suben los impuestos al tabaco desde el 1 de enero de 2025, dado que se trata de una «fuente relevante de ingresos para las haciendas territoriales» y porque es un instrumento al servicio de la política sanitaria, según justifica la enmienda socialista, que subraya que subir el precio del tabaco desincentiva su consumo.
El PSOE también propone aumentar la tributación del ahorro para rentas altas, de manera que las rentas que superen los 300.000 euros pagarán por este tramo un IRPF del 29 %, un punto más que ahora (0,5 puntos de la escala estatal y 0,5 puntos de la autonómica).
Asimismo, plantea neutralizar el impacto recaudatorio de la anulación por parte del Tribunal Constitucional de las reformas del impuesto de sociedades del PP a través de la limitación de la compensación de bases imponibles negativas de las grandes empresas y las deducciones por doble imposición, así como con la reversión los deterioros de valor. También se extiende durante dos años (2024 y 2025) la norma que solo permite compensar la mitad de las bases imponibles de las sociedades a los grupos de los que forman parte.
Por el contrario, plantea una bajada del impuesto de sociedades para las empresas que facturan menos de un millón de euros, que pagarán un 17 % por los primeros 50.000 euros de base imponible y el 20 % por el resto, en lugar del 23 % actual.
Otra de las enmiendas establece que el Gobierno impulsará la modificación de la directiva del IVA para permitir gravar los alquileres de corta duración, inferior a 30 días, en las zonas donde estos alojamientos dificultan el acceso a la vivienda o implican saturación turística. Esto implicaría que estos alquileres de corta duración dejarían de estar exentos de IVA y pasarían a tributar igual que los alojamientos hoteleros.