En concreto, el fondo, que emergió en 2020 en el accionariado de Repsol y alcanzó en octubre una participación máxima del 5,1%, ha visto reducida su participación en la petrolera en un 0,47% del capital, tras deshacerse de más de seis millones de títulos correspondientes a un colateral.
Así, Norges Bank controla de manera directa un paquete de más de 57,9 millones de acciones de Repsol -de ellos más dos millones de títulos todavía a través de un colateral-, representativo del 4,535%, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
A los actuales precios de mercado, esta participación del fondo soberano noruego en la petrolera supera los 786 millones de euros. Los títulos de Repsol cotizaban este lunes a las 12.53 horas a un precio de 13,57 euros, con una caída del 1,38%.
Norges Bank es el segundo máximo accionista del grupo dirigido por Imaz, tan sólo por detrás de la firma de inversión BlackRock, que posee un 5,475%.