En concreto, el precio medio del litro de gasolina ha descendido un 0,82% esta semana con respecto a la pasada, para acumular así su décima bajada consecutiva, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea. Habría que retroceder a finales del año pasado, cuando además todavía estaba vigente la bonificación del Gobierno de al menos 20 céntimos por litro para los carburantes, para encontrar un precio más barato.
Por su parte, el gasóleo ha encadenado su novena semana consecutiva de descensos, con una bajada del 0,96% respecto a la semana anterior, hasta los 1,543 euros el precio medio del litro. Así, el litro de diésel suma un descenso del 8,6% en su precio desde principios de octubre y cae a unos niveles que no se veían desde finales de julio.
Con esta espiral bajista, el precio del litro de gasolina se mantiene por debajo de los niveles en los que se situaba antes del estallido de la invasión rusa de Ucrania -1,592 euros por litro-, que comenzó el 24 de febrero de 2022. En el caso del gasóleo se mantiene todavía por encima del precio de entonces -1,479 euros por litro Además, estas caídas continúan alejando aún más a ambos carburantes de los máximos que registraron el verano de 2022, en julio, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros.
A pesar de estos descensos, con los precios actuales, llenar un depósito medio de 55 litros de gasolina tiene un precio de 86,5 euros, unos 4,6 euros más que en las mismas fechas de 2022, cuando ascendía a unos 81,8 euros, incluyendo el descuento de 20 céntimos por litro vigente en aquel momento.
Para los vehículos de diésel, llenar un depósito medio (55 litros) supone un desembolso de 84,8 euros, unos 1,2 euros menos que en el mismo período de 2022, momento en el que le precio era de 86 euros teniendo en cuenta el descuento.