Tras esta operación, el capital social de Iberdrola quedará fijado en 4.680 millones de euros, correspondiente a 6.240 millones de acciones. Esta operación fue aprobada por la junta general ordinaria de accionistas de Iberdrola el pasado 28 de abril y, posteriormente, el consejo de administración dio la orden de ejecución.
Iberdrola ha explicado que la finalidad de la reducción de capital es la amortización de acciones propias para coadyuvar a la «política de remuneración del accionista de la sociedad.
Esta reducción de capital se realizará con cargo a reservas de libre disposición, realizando la correspondiente dotación de una reserva por capital amortizado, por importe igual al valor nominal de las acciones propias efectivamente amortizadas. Los acreedores de Iberdrola no dispondrán del derecho de oposición.
La sociedad ha precisado que, como las acciones a amortizar son de su titularidad, la operación no implicará la devolución de aportaciones. Los preceptivos anuncios de reducción de capital se publicarán mañana, 4 de julio, en el Boletín Oficial del Registro Mercantil y en la página web corporativa de Ercros.