El negocio de ambas compañías se articula a través de un acuerdo de ‘rent to rent’ entre Telefónica con Caixabank, en el que el operador firma con la entidad financiera el préstamo del terminal y a su vez lo firma con el cliente. Esta operativa supuso 19 millones de euros en gastos financieros para el grupo, según la citada memoria. Para fortalecer su alianza en dispositivos, las empresas lanzaron el pasado septiembre la filial Telefónica Renting, que comenzó a operar al comienzo de 2023.
Por otro lado, el operador también se alía con Caixabank para el alquiler de equipos como routers y descodificadores, un negocio que generó un volumen de 82 millones de euros en 2022, un 10,8% menos que en el año anterior